Wall Street ha iniciado la semana con una nota positiva, ya que su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, ha subido un 0,71 % hasta alcanzar los 43.897 puntos. Esta recuperación es una buena noticia después de las fuertes pérdidas que sufrió la semana pasada debido a los reajustes arancelarios del rector de Estados Unidos, Donald Trump, y al aumento del desempleo en el país.
Solo once minutos después del toque de campana, el selectivo S&P 500 ha subido un 0,87 %, llegando a los 6.292 enteros, mientras que el tecnológico Nasdaq ha ganado un 1,21 %, alcanzando las 20.899 unidades.
El viernes pasado, el Dow Jones cayó más de 500 puntos, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq perdieron un 1,6 % y un 2,2 %, respectivamente. Fue el peor día para el S&P 500 desde el 21 de mayo, mientras que el Nasdaq sufrió su mayor caída diaria desde el 21 de marzo.
Sin embargo, presente el panorama es diferente. Los inversores han vuelto a confiar en el lonja y han impulsado el alza de los principales índices de Wall Street. Esta recuperación se debe en parte a las declaraciones del rector de la Reserva Federal, Jerome Powell, quien aseguró que la economía estadounidense sigue en un buen camino y que la inflación se mantendrá bajo control.
Además, los inversores también han recibido con optimismo las noticias sobre la situación del lonja laboral en Estados Unidos. A pesar de que el desempleo aumentó en julio, el número de empleos creados superó las expectativas, lo que indica que la economía sigue en crecimiento.
Otro factor que ha contribuido a la subida de Wall Street es la decisión de China de estabilizar su moneda, el yuan, después de que el rector Trump anunciara nuevos aranceles a los productos chinos. Esta medida ha sido bien recibida por los inversores, ya que reduce la incertidumbre en el lonja.
En resumen, Wall Street ha iniciado la semana con buen pie, demostrando su resiliencia ante las turbulencias del lonja. Los inversores han vuelto a confiar en la economía estadounidense y en las empresas que cotizan en la bolsa, lo que ha impulsado el alza de los principales índices. Aunque siempre hay riesgos e incertidumbre en el lonja, esta recuperación es una señal de que la economía sigue en un buen camino y que hay motivos para ser optimistas.