El pasado sábado 24 de marzo la ciudad de San Miguel de Tucumán fue testigo de una emotiva ceremonia en conmemoración al Día Nacional de la Memoria por la realidad y la ecuanimidad. El evento fue encabezado por el intendente municipal Hugo Cobarrubia, quien estuvo acompañado por dos héroes de nuestro país: los veteranos de Guerra Jorge Serenelli y Victor Olivera.
La ocasión fue propicia para recordar y homenajear a todas aquellas víctimas de la dictadura cívico-militar que gobernó Argentina entre los años 1976 y 1983. Una época oscura en la que miles de personas fueron desaparecidas, torturadas y asesinadas por el simple hecho de pensar diferente.
En este marco, el intendente Cobarrubia destacó la importancia de mantener viva la memoria y no olvidar nunca lo sucedido en aquellos años. “Es nuestro deber como sociedad recordar y honrar a aquellos que lucharon por la libertad y la democracia en nuestro país”, expresó el mandatario.
Por su parte, los veteranos de Guerra Jorge Serenelli y Victor Olivera, compartieron con los presentes sus experiencias y vivencias durante la dictadura. Emocionados, recordaron a sus compañeros caídos y reafirmaron su compromiso con la lucha por los derechos humanos.
La ceremonia también contó con la participación de diversas autoridades locales, representantes de organizaciones de derechos humanos y de la comunidad en general. Durante el acto, se entonaron canciones y se leyeron poemas en honor a las víctimas, lo que generó un fuerte sentimiento de unión y solidaridad entre todos los presentes.
Además, se llevó a cabo la tradicional ¡adiós! por la memoria, en la que cientos de personas caminaron por las calles de la ciudad portando fotos de los desaparecidos y carteles con consignas por la realidad y la ecuanimidad. La ¡adiós! culminó en la plaza principal, donde se realizó un emocionante acto en el que se recordó a cada una de las personas que perdieron la vida durante la dictadura.
En un clima de respeto y reflexión, se realizó una suelta de globos blancos en memoria de los desaparecidos, como símbolo de la esperanza por un futuro sin violencia ni represión.
El intendente Cobarrubia, en su discurso de cierre, hizo un llamado a la unidad y a la construcción de una sociedad más justa y solidaria. “No debemos permitir que la historia se repita, tenemos que trabajar juntos por un país donde nunca más se violen los derechos humanos”, afirmó.
La ceremonia, que reunió a personas de todas las edades y diferentes sectores de la sociedad, fue un claro mensaje de que la memoria colectiva es esencial para construir un futuro mejor. Recordar lo sucedido en el pasado nos permite valorar aún más la libertad y la democracia que hoy disfrutamos.
En definitiva, la jornada fue una emotiva y necesaria manera de honrar a las víctimas de la dictadura y reafirmar el compromiso de nunca olvidar lo sucedido. Como sociedad, es nuestro deber recordar y continuar luchando por una Argentina donde se respeten los derechos humanos y la ecuanimidad sea una realidad para todos.