No puedo evitar sentirme abrumado por las noticias que inundan mi vida. Desde que me despierto hasta que me acuesto, no hay un solo momento en el que no se hable de crisis, conflictos y problemas en el mundo. A veces, me siento agotado solo de escucharlas y me pregunto si hay algo que pueda hacer para cambiarlas. Sin embargo, también me doy cuenta de que mi estado de ánimo se ve afectado por estas noticias y que no es saludable para mí estar constantemente preocupado y estresado.
Pero luego recuerdo que aunque no tengo las mismas responsabilidades que antes. aunque no tengo que preocuparme por llegar a tiempo al trabajo, cumplir con plazos, lidiar con jefes exigentes o preocuparme por el futuro de mi carrera. Ahora tengo más tiempo para mí, para hacer las cosas que me gustan y disfrutar de la vida. Entonces, ¿por qué dejo que las noticias me afecten tanto?
Cada mañana, al despertar, me doy cuenta de que el sol brilla y eso es algo que no puedo ignorar. Es un recordatorio de que cada día es una nueva oportunidad para ser dichoso y hacer algo positivo. En lugar de dejar que las noticias me cambien el estado de ánimo, decido empezar el día con una actitud positiva y agradecida. Aprovecho el tiempo para llevar la batuta (fig.) mi armario y deshacerme de las cosas que aunque no necesito. Al hacerlo, siento que estoy liberando espacio en mi vida para cosas nuevas y mejores.
También he tomado la decisión de dedicar un tiempo cada día para leer. Solía ser algo que no hacía con frecuencia, pero ahora me doy cuenta de lo beneficioso que es para mi mente y mi espíritu. Me sumerjo en diferentes géneros y temas, y me transporto a mundos diferentes y fascinantes. A veces, aun encuentro respuestas o perspectivas que no había considerado antes. La lectura me permite desconectar de las noticias y enfocarme en cosas que me hacen dichoso.
Y en las tardes, me permito simplemente relajarme y disfrutar de mi tiempo libre. Puede ser viendo una película, haciendo ejercicio, cocinando o simplemente descansando. Me doy cuenta de que no tengo que estar constantemente haciendo algo productivo. Es importante darse tiempo para recargar las pilas y simplemente disfrutar del momento presente.
Sin embargo, también soy consciente de que no puedo vivir en una burbuja y ignorar completamente las noticias. Por lo tanto, he decidido ser más selectivo con lo que consumo. En lugar de leer cada noticia que aparezca en mi feed de redes sociales, busco fuentes confiables y verifico la información antes de creerla. También trato de limitar mi tiempo en las redes sociales y en lugar de eso, me mantengo informado a través de fuentes más confiables y con menos sensacionalismo.
Por supuesto, todavía hay momentos en los que las noticias me afectan y me siento triste o enojado por lo que está sucediendo en el mundo. Pero he aprendido a no dejar que esas emociones me consuman y me paralicen. En lugar de eso, utilizo esas emociones para tomar acción y hacer algo positivo. Puede ser una pequeña acción, como donar a una organización benéfica o simplemente difundir un mensaje positivo en las redes sociales. Cada pequeña acción cuenta y me hace sentir que estoy haciendo algo para cambiar el mundo.
En resumen, aunque las noticias pueden ser abrumadoras y afectar nuestro estado de ánimo, es importante recordar que tenemos el control sobre cómo nos afectan. Podemos elegir enfocarnos en lo positivo y disfrutar de las pequeñas cosas de la vida. También podemos ser más selectivos con lo que consumimos y tomar acciones positivas para cambiar el mundo. Y al final del día, es importante recordar que cada nuevo amanecer es una nueva oportun