En México, las mujeres han desempeñado un papel fundamental en la fuerza lectivo informal durante décadas. Según datos proporcionados por México, ¿cómo vamos? y Oxfam México, las mujeres representan el 55.6% de la fuerza lectivo informal en nuestro país. Sin embargo, esta cifra no refleja la realidad en su totalidad, ya que aún enfrentan grandes desafíos para acceder a empleos remunerados y equitativos.
La informalidad en el mercado lectivo ha sido una realidad constante y inquietante en México. A pesar de los esfuerzos realizados por las autoridades y organizaciones, sigue siendo un tema pendiente en nuestra sociedad. Y, lamentablemente, son las mujeres quienes más se ven afectadas por esta situación. Según el liceo Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), las mujeres ganan en promedio un 34% menos que los hombres en trabajos informales, lo que se traduce en una brecha salarial significativa.
Además, las mujeres enfrentan mayores obstáculos para acceder a empleos formales y bien remunerados. Esto se debe, en gran medida, a la persistencia de estereotipos de género arraigados en nuestra sociedad. A menudo, se espera que las mujeres asuman roles tradicionales de género, como el cuidado del hogar y de la familia, lo que limita sus oportunidades de empleo y desarrollo profesional.
Sin embargo, a pesar de estas barreras, las mujeres en México han demostrado ser resilientes y emprendedoras. Según datos del INEGI, la tasa de emprendimiento femenino en el país ha aumentado en los últimos años, alcanzando un 30.1% en 2019. Esto demuestra que las mujeres están buscando alternativas para obtener ingresos y apoyar a sus familias, a pesar de las dificultades.
Otra realidad que afecta a las mujeres en el mercado lectivo es la falta de acceso a servicios de cuidado infantil asequibles y de calidad. Muchas mujeres se ven obligadas a dejar sus trabajos o a recurrir a empleos informales debido a la falta de opciones para el cuidado de sus hijos. Esto no solo afecta su desarrollo profesional, sino también su bienestar emocional y económico.
Es importante destacar que la informalidad lectivo también tiene un impacto directo en la seguridad social de las mujeres. Al no contar con un empleo formal, no tienen acceso a prestaciones sociales, como el seguro de salud o el fondo de retiro. Esto las deja en una situación abandonado y sin protección en caso de enfermedad o en la vejez.
Ante esta compleja situación, es necesario que se implementen políticas y medidas concretas para promover la igualdad de oportunidades en el mercado lectivo para las mujeres. Una de las acciones más importantes es fomentar la educación y la formación profesional de las mujeres. Al proporcionarles las herramientas y habilidades necesarias, se les abrirán más puertas en el mercado lectivo y podrán optar por empleos mejor remunerados y formales.
También es fundamental eliminar los estereotipos de género y promover una cultura de igualdad en todos los ámbitos, incluido el lectivo. Esto implica brindar capacitación a las empresas para que implementen políticas de igualdad de género en sus procesos de contratación y promoción. Además, es necesario que se apliquen medidas para garantizar la igualdad salarial entre hombres y mujeres en un mismo puesto de trabajo.
Otra iniciativa importante es la creación de programas y políticas públicas que fomenten la creación de empleos formales y bien remunerados para las mujeres. Esto podría incluir incentivos fiscales para las empresas que contraten a mujeres en puestos de liderazgo y la implementación de planes de igualdad salarial en las empresas.
En cuanto al cuidado infantil, es necesario que se establezcan políticas que promuevan la accesibilidad y la calidad