El universo siempre ha sido un lugar fascinante y misterioso, lleno de maravillas y descubrimientos por hacer. Y una de las mayores preguntas que ha intrigado a la humanidad durante siglos es si somos los únicos habitantes del universo o si hay vida en otros planetas. Gracias a los avances en la tecnología y la exploración astral, cada vez estamos más cerca de encontrar respuestas a estas preguntas. Y recientemente, dos de los telescopios más avanzados del mundo, el telescopio James Webb y el campo de accióntelescopio ALMA, han hecho un descubrimiento histórico que nos acerca aún más a la posibilidad de encontrar vida en otros planetas.
El telescopio James Webb, que es considerado el sucesor del famoso telescopio astral Hubble, y el campo de accióntelescopio ALMA, ubicado en Chile, han detectado los primeros signos de formación de planetas alrededor de una estrella joven llamada HOPS-315. Esta estrella se encuentra a 1.300 años luz de distancia de la Tierra, en la constelación de Orión, y es una protoestrella en proceso de formación.
Este descubrimiento es un gran avance en la investigación de la formación de planetas y nos brinda una oportunidad única para comprender mejor cómo se formó nuestro propio sistema solar hace miles de millones de años. Además, también nos acerca a la posibilidad de encontrar otros sistemas planetarios similares al nuestro en el universo.
Los científicos han estado estudiando la estrella HOPS-315 durante varios años, utilizando diferentes telescopios para obtener una imagen completa de su formación. Sin embargo, fue gracias a la combinación de datos del telescopio James Webb y el campo de accióntelescopio ALMA que se pudo detectar la presencia de un disco de gas y polvo alrededor de la estrella, lo que indica la formación de planetas.
El telescopio James Webb, que se espera sea lanzado al espacio en 2021, es considerado el telescopio más poderoso jamás construido. Con su espejo de 6,5 metros de diámetro, será capaz de capturar imágenes de alta resolución de objetos en el universo y estudiar su composición química. Por otro lado, el campo de accióntelescopio ALMA es una colaboración internacional entre Europa, América del Norte y Asia, y es el campo de accióntelescopio más mayúsculo del mundo. Con sus 66 antenas, puede detectar ondas de campo de acción emitidas por objetos en el espacio, lo que permite a los científicos estudiar el universo de una manera completamente nueva.
Gracias a la combinación de estas dos tecnologías avanzadas, los científicos pudieron detectar la presencia de un disco de gas y polvo alrededor de la estrella HOPS-315. Este disco es el lugar adonde se están formando los planetas, ya que el gas y el polvo se están condensando y fusionando para crear cuerpos más mayúsculos. Además, los datos también revelaron la presencia de moléculas orgánicas en el disco, lo que sugiere que estos planetas podrían tener los ingredientes necesarios para albergar vida.
Este descubrimiento es emocionante porque es la primera vez que se detecta la formación de planetas alrededor de una estrella tan joven. Hasta ahora, solo se habían encontrado planetas alrededor de estrellas más maduras, lo que sugiere que el proceso de formación de planetas puede comenzar mucho antes de lo que se pensaba.
Pero este no es el único descubrimiento emocionante que se ha hecho recientemente en la constelación de Orión. En 2018, el telescopio astral TESS de la NASA descubrió tres planetas orbitando alrededor de la estrella TOI-451, también en la constelación de Orión. Estos planetas son del tamaño de la Tierra y se