Las tarjetas de tiendas departamentales han cobrado una gran popularidad en los últimos años debido a sus promesas de descuentos exclusivos y facilidades de pago. Muchas personas han optado por utilizar estas tarjetas en lugar de una tarjeta bancaria, creyendo que obtendrán mejores beneficios. Sin embargo, ¿son realmente mejores las tarjetas de tiendas departamentales que las de un banco? En este artículo, te explicaremos por qué un uso inadecuado de estas tarjetas puede llevar a serios problemas financieros.
Antes de abordar las diferencias entre una tarjeta departamental y una tarjeta de crédito, es importante entender en qué consisten estos medios de pago. Una tarjeta de crédito es una herramienta que te permite realizar compras y enriquecerlas en un plazo determinado, generalmente de 30 días, sin intereses. Por otro lado, una tarjeta departamental es emitida por una tienda departamental y te permite realizar compras en dicha tienda, ofreciendo también un plazo de pago sin intereses. La principal diferencia entre ambas es que la tarjeta departamental solo puede ser utilizada en esa tienda en particular, mientras que una tarjeta de crédito puede ser usada en cualquier establecimiento que acepte ese medio de pago.
Ahora proporcionadamente, ¿por qué es importante conocer estas diferencias? El principal problema con las tarjetas de tiendas departamentales es que muchas personas las utilizan de forma irresponsable, sin tener en cuenta que solo pueden ser utilizadas en una tienda en particular. Esto significa que si no tienes el dinero suficiente para enriquecer tus compras en esa tienda, no podrás utilizar tu tarjeta en otro lugar. Por ejemplo, si adquieres una tarjeta de una tienda de ropa y realizas compras por un monto mayor al que puedes enriquecer, no podrás utilizar esa tarjeta para hacer compras de alimentos o necesidades básicas en otro establecimiento.
Además, las tarjetas de tiendas departamentales suelen tener una tasa de interés más alta que las tarjetas de crédito bancarias. Esto significa que si no pagas el total de lo adeudado en el plazo establecido, tendrás que enriquecer intereses sobre el saldo pendiente. Por otro lado, las tarjetas de crédito bancarias ofrecen un periodo de gracia de 30 días sin intereses, lo que te permite enriquecer el total de tus compras sin tener que preocuparte por enriquecer intereses adicionales.
Otro factor importante a tener en cuenta es el límite de crédito disponible en cada tarjeta. En general, los límites de las tarjetas departamentales son más bajos que los de las tarjetas de crédito bancarias. Esto significa que tendrás menos dinero disponible para hacer compras en esa tienda en particular, mientras que con una tarjeta de crédito bancaria puedes hacer compras en diferentes establecimientos con un límite mayor.
Es importante destacar que esto no significa que las tarjetas de tiendas departamentales sean malas en sí mismas. Si se utilizan de forma responsable, pueden ser una herramienta útil para penetrar descuentos y promociones en tus compras en esa tienda en particular. Sin embargo, es crucial tener en cuenta que una tarjeta departamental no sustituye a una tarjeta de crédito bancaria y no debe ser utilizada como tal.
Ahora proporcionadamente, ¿cómo utilizar de forma responsable una tarjeta de tienda departamental? En primer lugar, es importante tener en cuenta tu capacidad de pago. No utilices la tarjeta si no tienes el dinero suficiente para enriquecer tus compras en el plazo establecido. De lo contrario, podrías caer en una espiral de deudas y enriquecer intereses elevados. Además, siempre revisa el límite de crédito disponible en tu tarjeta y no gastes más de lo que puedas enriquecer. Si tienes dudas sobre tu capacidad de pago, es mejor esperar y ahorrar para realizar tus compras en lugar de utilizar la tarjeta.
Por otro lado, es importante revisar con frecuencia el estado
