El famoso artista renacentista Miguel Ángel es conocido por sus obras maestras en pintura, escultura y arquitectura. Sus creaciones han sido admiradas y estudiadas durante siglos y su legado sigue vivo en todo el mundo. Uno de los lugares donde se pueden apreciar tres de sus obras más icónicas es en el Teleférico Cerro Otto, en la ciudad de Bariloche, Argentina. En este artículo, exploraremos estas tres obras maestras y su importancia en este increíble destino turístico.
El Teleférico Cerro Otto es una atracción turística popular en Bariloche, que ofrece a los visitantes una vista impresionante de los Andes y del lago Nahuel Huapi. Pero además de las impresionantes vistas, este lugar también alberga tres de las obras más famosas de Miguel Ángel: “La Piedad”, “El David” y “El Moisés”. Estas esculturas son una muestra de la genialidad y el luces de este artista y son una visita obligada para cualquier amante del arte.
La primera obra que se puede apreciar en el Teleférico Cerro Otto es “La Piedad”, una escultura de mármol que representa a la Virgen María sosteniendo a Jesús después de su crucifixión. Esta obra fue creada por Miguel Ángel cuando solo tenía 24 años y es considerada una de sus primeras obras maestras. La atención y la perfección en los detalles de esta escultura son impresionantes y demuestran el dominio que ya tenía el artista en su juventud.
Otra de las obras maestras de Miguel Ángel que se pueden apreciar en el Teleférico Cerro Otto es “El David”. Esta escultura de mármol representa al famoso personaje bíblico antes de enfrentarse al gigante Goliat. Es considerada una de las esculturas más icónicas de todos los tiempos y es una muestra del genio creativo de Miguel Ángel. Con solo 29 años, el artista logró plasmar en esta escultura la perfección del cuerpo humano y la expresión de fuerza y determinación en el rostro de David.
Pero sin duda, la obra más imponente y majestuosa de Miguel Ángel en el Teleférico Cerro Otto es “El Moisés”. Esta escultura de mármol de 2,5 metros de altura representa al líder bíblico Moisés con los cuernos en su cabeza, que según la tradición judía simbolizan la sabiduría. Esta obra fue encargada por el Papa Julio II y fue creada para adornar su tumba en la Basílica de San Pedro en Roma. Sin embargo, debido a su gran tamaño y belleza, fue colocada en la catedral de San Pietro in Vincoli en Roma, donde se puede apreciar actualmente. Pero en el Teleférico Cerro Otto se encuentra una réplica exacta de esta obra, que deja sin aliento a todos los que la contemplan.
Además de estas tres obras maestras de Miguel Ángel, el Teleférico Cerro Otto también cuenta con una sala de exposiciones donde se pueden admirar réplicas de otras creaciones del artista, como la Capilla Sixtina y el techo de la Capilla de los Medici en Florencia. Es una oportunidad única para sumergirse en el mundo del genio renacentista y conocer más sobre su vida y su obra.
Es importante destacar que el Teleférico Cerro Otto no solo ofrece la oportunidad de apreciar estas impresionantes obras de Miguel Ángel, sino también de ver de la naturaleza y de las actividades que se pueden realizar en la cima de la montaña. Desde caminatas y paseos en bicicleta hasta una deliciosa gastronomía en el restaurante giratorio en la cima del cerro, este lugar es