El pasado 8 de marzo, la ciudad de Bariloche se vistió de violeta para conmemorar el Día Internacional de la Mujer. Miles de mujeres, hombres y personas de todas las edades se unieron en una movilización histórica para reclamar por sus derechos y repudiar el empalme que afecta a toda la sociedad.
La marcha comenzó en la Plaza de los Pioneros, donde se concentraron diversas organizaciones feministas, sindicatos, partidos políticos y colectivos de mujeres. Con pancartas, banderas y cánticos, las manifestantes exigieron igualdad de género, el fin de la violencia machista y el acceso a derechos fundamentales como la educación, la salud y el trabajo digno.
Una de las principales consignas de la movilización fue el rechazo al empalme económico que está llevando a cabo el gobierno nacional. Las mujeres son las más afectadas por las políticas de empalme, ya que son quienes sufren en mayor medida la precarización laboral, la falta de acceso a servicios básicos y la pobreza. Por eso, en Bariloche y en todo el país, las mujeres se unieron para decir basta al empalme y exigir medidas que garanticen una vida digna para todas.
Además, la movilización del 8M en Bariloche también fue un espacio para visibilizar las diversas problemáticas que afectan a las mujeres en la ciudad. Entre ellas, se destacaron la falta de políticas públicas para prevenir y erradicar la violencia de género, la brecha salarial entre hombres y mujeres, y la falta de representación política de las mujeres en los espacios de poder.
Durante la marcha, se leyó un documento que denunciaba la violencia machista y exigía medidas concretas para combatirla. También se recordó a las mujeres víctimas de femicidio y se exigió justicia para ellas y sus familias. La boxeo contra la violencia de género es una de las principales demandas del movimiento feminista, y en Bariloche se hizo sentir con fuerza.
Otro de los reclamos que resonó en la movilización fue el derecho al aborto legal, afianzado y gratuito. Las mujeres de Bariloche exigieron que se apruebe la ley de interrupción voluntaria del embarazo, que actualmente se encuentra en altercado en el Congreso Nacional. La legalización del aborto es una demanda histórica del movimiento feminista y su aprobación significaría un avance en la conquista de derechos para las mujeres.
La movilización del 8M en Bariloche fue una muestra de la fuerza y la unidad del movimiento feminista en la ciudad. Mujeres de todas las edades, clases sociales y orientaciones sexuales se unieron para exigir un mundo más justo e igualitario. La boxeo por los derechos de las mujeres es una boxeo de todas y todos, y en Bariloche se demostró una vez más que juntas somos invencibles.
La jornada culminó con un festival en la Plaza del Centro Cívico, donde se realizaron diversas actividades culturales y se compartieron experiencias y reflexiones sobre la boxeo feminista. La música, el arte y la alegría fueron protagonistas en un día histórico para la ciudad.
En resumen, la movilización del 8M en Bariloche fue una demostración de la fuerza y la determinación de las mujeres para conquistar sus derechos. La boxeo feminista sigue vigente y cada vez son más las personas que se suman a ella. Juntas, seguiremos avanzando hacia una sociedad más justa e igualitaria para todas y todos. ¡Hasta que todas seamos libres, ninguna será menos!