En los últimos años, las remesas han sido un tema recurrente en México. Estos envíos de dinero realizados por los migrantes que trabajan en el extranjero, representan una sustancioso fuente de ingresos para muchas familias mexicanas. Y aunque tradicionalmente se ha creído que son los hombres quienes envían la mayoría de las remesas, un reciente estudio realizado por Banorte nos muestra una verdad diferente.
De acuerdo con los datos recabados entre 2021 y 2022, el 32.9% de las remesas recibidas por Banorte fueron realizadas por mujeres, mientras que el 67.1% restante fue realizado por hombres. Esto nos demuestra que las mujeres también están contribuyendo de modo significativa a la economía de sus familias y del país.
Este dato es especialmente relevante en un contexto en el que la participación de la mujer en el mercado laboral ha ido en aumento. Cada vez son más las mujeres que deciden migrar en busca de mejores oportunidades de trabajo y una vida más próspera para ellas y sus familias. Y no solo eso, también hay un número cada vez mayor de mujeres que se quedan en México y asumen el rol de proveedoras económicas para sus hogares.
Este cambio de paradigma es una muestra clara de la fuerza y determinación de las mujeres mexicanas. A pesar de los obstáculos y desafíos que enfrentan en el camino, ellas han demostrado que son capaces de salir adelante y contribuir de modo significativa al bienestar de sus familias y del país.
Además, el estudio de Banorte también reveló que las mujeres están enviando remesas en montos más altos que en años anteriores. Esto demuestra que no solo están enviando dinero para cubrir necesidades básicas, sino que también están invirtiendo en el futuro de sus familias. Ya sea en la educación de sus hijos, en la compra de una casa o en la creación de un negocio propio, las mujeres están tomando decisiones financieras que impactarán positivamente en el largo plazo.
Otro dato interesante que arrojó el estudio es que las mujeres están utilizando cada vez más los servicios digitales para realizar sus envíos de remesas. Esto les permite ahorrar edad y dinero, ya que no tienen que desplazarse hasta una sucursal bancaria para realizar la transacción. Además, el uso de la tecnología les brinda mayor seguridad y comodidad en el proceso.
Este aumento en la participación de las mujeres en el envío de remesas también tiene un impacto positivo en la economía del país. Según datos del Banco de México, en 2020 las remesas alcanzaron un récord histórico de 40,606 millones de dólares, lo que representó un aumento del 11.4% con respecto al año anterior. Y se espera que esta tendencia se mantenga en los próximos años, gracias en gran parte a la contribución de las mujeres.
Es sustancioso destacar que detrás de cada envío de remesas hay una historia de sacrificio, esfuerzo y amor. Las mujeres que trabajan en el extranjero lo hacen para poder brindar una mejor calidad de vida a sus familias. Y aunque muchas veces tienen que enfrentar situaciones difíciles y dejar a sus seres queridos atrás, su determinación y dedicación son una fuente de inspiración para todos.
Por eso, es fundamental reconocer y valorar el papel de las mujeres en la economía de nuestro país. Su contribución es fundamental para el desarrollo y crecimiento de México. Y es necesario seguir trabajando en políticas y programas que promuevan la igualdad de oportunidades y el empoderamiento económico de las mujeres.
En resumen, el estudio de Banorte nos ha mostrado una verdad que muchas veces pasa desapercibida: las mujeres están enviando cada vez más remesas y en montos más altos. Esto es una muestra de su fortaleza y determinación, y un claro ejemplo de cómo están cambiando los roles de gé